Ante todo, demos un vistazo a la nueva clasificación de los Trastornos de Ansiedad:
Trastornos-de-AnsiedadEn importante tener en mente, frente a un paciente con sintomatología de ansiedad, las siguientes causas:
Neurológicas: Neoplasias, traumatismos y sindromes posconcusión, enfermedad cerebrovascular, hemorragia subaracnoidea, migraña, encefalitis, sífilis, esclerosis múltiple, enfermedades de Wilson o Huntington, epilepsias.
Sistémicas: Hipoxia, enfermedades cardiovasculares, insuficiencia respiratoria, anemia.
Endócrinas: disfunciones hipofisaria, tiroidea, paratiroidea y suprarrenal; feocromocitoma.
Autoinmunes: Lupus eritematoso sistémico, Artritis reumatoidea, Poliarteritis nodosa, arteritis temporal.
Carencia de vitamina B12, Pelagra.
Hipoglucemia, sindrome carcinoide, sindrome febril inespecífico o infecciones crónicas, porfiria, mononucleosis infecciosa, sindrome posthepatitits, aumento de la uremia.
Intoxicaciones y abstinencias por sustancias y/o tóxicos diversos, intolerancia a la aspirina.
En definitiva, y aún si el paciente transita una situación psicosocial altamente estresante, hacer un buen diagnóstico diferencial descartando las causas anteriormente descriptas define el éxito del tratamiento.